martes, julio 17, 2012

¡No te angusties mas!…


 
¿Sabias que se han hecho estudios del funcionamiento del cerebro bajo distintas condiciones externas? Pues se ha determinado que el estar bajo suma presión, puede detonar en problemas cardiacos o embolias cerebrales; todo dependiendo del estado de salud y edad de la persona.

Y lo que han descubierto estas resonancias magnéticas del cerebro, es que cuando una persona se encuentra en oración, su cerebro se comporta de manera diferente, su cerebro ‘descansa’ de la presión que los problemas que le agobian.

Y  la ciencia medica queriendo encontrar una actividad similar, --que genere los mismos resultados--, pero SIN la implicación religiosa, en la actualidad, los médicos están recomendando a sus pacientes bajo mucho estrés, el dedicar un tiempo diario a la meditación…  Excuso decirte el auge que esta teniendo la yoga y la meditación Zen; lo malo es que estas, tal vez cuidan y protegen el corazón y el cerebro, PERO no resuelven el problema que origina el estrés; ¡LA ORACION SI LOS RESUELVE!

Nada debe angustiaros; al contrario, en cualquier situación, presentad a Dios vuestros deseos, acompañando vuestras oraciones y súplicas con un corazón agradecido.  Y la paz de Dios, que desborda toda inteligencia, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos por medio de Cristo Jesús.” (Filipenses 4:6-7 BLP)

Aquí nuevamente el apóstol Pablo usa un término totalmente absoluto, términos que solo en relación con Dios se pueden manejar; “Nada debe angustiaros”; y no solo da la orden, sino que explica la metodología para poder llegar a cumplir esta situación: sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.” (RV60)

San Pablo indica la forma de orar a Dios para que recibamos la respuesta a nuestra petición

La primera condición, es que debemos ser parte de la familia de Dios, lavados y comprados por la sangre de Cristo.
La segunda condición es que deberemos de exponerle a Dios nuestra suplicas en oración. A Dios, nuestro Padre, le gusta que le pidamos.
La tercera condición es que acompañemos nuestra oración y ruego con agradecimiento de corazón por lo que El es en nuestra vida y por todo lo que nos ha dado.

Y Pablo dice que después de esto, no solamente nuestro cerebro estará descansado, sino que la paz de Dios que en mas grande que todo el entendimiento humano, llenara nuestra vida y por ende guardara nuestros corazones en tranquilidad y salud así como nuestra mente y pensamientos (nuestro cerebro).

Miles de años antes que la ciencia médica lo descubriera, el cardiólogo San Pablo, ya nos recetaba el entregar en oración a Dios nuestras aflicciones, para descansar en El y librar a nuestro corazón y cerebro de un infarto por estrés.

La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.” (Juan 14:27 LBLA)

Imagínate lo mas maravilloso de Jesucristo; ¡te promete darte de SU PAZ!, que es una paz divina e inagotable.


RENAN CARIAS -PAZ EN LA TORMENTA   http://www.youtube.com/watch?v=b4Rz16TkgGk

No hay comentarios:

Publicar un comentario