Estando tan
acostumbrados a nuestra vida cotidiana, tan llena de cambios, ajustes de rumbo
y variaciones, que el saber que DIOS NO CAMBIA, nos proporciona un sentimiento
de estabilidad, confianza y obviamente de paz.
"Toda buena dádiva y todo don
perfecto descienden de lo alto, del Padre de las luces, en quien no hay
cambio ni sombra de variación." (Santiago
1:17 LBLA)
La segunda ley de la termodinámica, nos dicen que todo lo existente
tiene un factor de cambio, de deterioro o envejecimiento. Nosotros desde el instante en que
somos concebidos, iniciamos un proceso constante de cambio, nada en nuestro
plano físico esta exento de cambios, mutaciones o envejecimiento. La misma Tierra,
un día en el futuro desaparecerá, las estrellas y galaxias cambian y
desaparecen; pero DIOS SIGUE SIENDO EL MISMO: ¡NO CAMBIA!
“Tú fundaste la tierra
desde el principio, y con tus propias manos
formaste los cielos. Un día,
ellos serán destruidos; envejecerán, como
vestidos usados, y tú los cambiarás por otros;
¡Pero tú permanecerás! ¡Tú seguirás siendo el mismo,
y tus años nunca tendrán fin!” (Salmo 102:25-27 RVC)
Y
en el plano de las relaciones, los conocimientos y los sentimientos; lo que creíamos hace años que era un principio o ley
universal, hoy queda totalmente derribado, y lo mismo sucede con los principios
de los negocios y las relaciones humanas. En el museo de Louvre en Paris,
existe un área dedicada a lo que en alguna época de la humanidad se
consideraban como las grandes leyes del universo, y hoy, solo son piezas de
museo: en astronomía, en fisiología humana, en patología, etc., al visitar esta
parte del museo uno piensa: ¿pero como podían creer que esto era así? Todo en
este mundo cambia, TODO CAMBIA, solo Dios permanece igual:
“Porque yo, el SEÑOR, no
cambio;...”(Malaquías 3:6 a LBLA)
Y
en el plano personal; que frustrante es saber que al momento de terminar los
estudios universitarios, parte de lo que aprendimos ya es obsoleto. Que los
compromisos que contrajeron con nosotros, están siendo cambiados de las
condiciones originales, en si, lo único seguro que existe en nuestra vida es el
cambio, la reformulación de rumbo. Lo que creíamos que viviríamos en nuestro
futuro, esos planes tan maravillosos sufrieron un cambio, una adecuación que no
nos permitirá llegar al destino final que inicialmente tuvimos.
“Pero los planes del Señor quedan firmes para
siempre;
los designios de su mente son eternos.” (Salmo
33:11 NVI)
Si
a ti como a mi no te agradan los cambios inesperados, las reprogramaciones de
rutas de vida y las sorpresas que te quitan el aliento; busca algo que sea
firme y sin cambios, para que ese algo sea tu roca de estabilidad en medio de
tantos movimientos violentos en la vida.
“El
cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras jamás pasarán.” (Mateo
24:35 NVI)
Tú
y yo solo tenemos a nuestro alcance, dos cosas que son eternas: nuestra alma
inmortal y la Palabra de Dios. Y de estas dos cosas eternas, solo una NUNCA
CAMBIA, y esta es la Palabra de Dios. Busca en la Biblia las promesas de Dios
específicamente para ti, El te las mostrara directamente a tu corazón, abrázalas
muy fuerte, y que sean la roca de tu vida, porque hoy, ya sabes que DIOS NO
MIENTE NI CAMBIA.
"»Por mi parte, yo estoy a punto de ir por el camino
que todo mortal transita. Ustedes bien saben que ninguna de las buenas
promesas del Señor su Dios
ha dejado de cumplirse al pie de la letra. Todas se han hecho realidad, pues él no ha faltado
a ninguna de ellas." (Josue 23:14)
"Sean
fuertes y valientes. No teman ni se asusten ante esas naciones, pues el Señor su Dios siempre los acompañará; nunca
los dejará ni los abandonará.» Llamó
entonces Moisés a Josué, y en presencia de todo Israel le dijo: «Sé fuerte y valiente, porque tú entrarás con este
pueblo al territorio que el Señor juró darles a sus antepasados. Tú
harás que ellos tomen posesión de su herencia. El Señor mismo marchará al frente de ti y
estará contigo; nunca te dejará ni te abandonará. No temas ni te desanimes.»" (Deuteronomio 31.6, 8)
“así
es también la palabra que sale de mi boca: No
volverá a mí vacía, sino
que hará lo que yo deseo y
cumplirá con mis propósitos”.(Isaías 55:11 NVI)
A
DIOS sea la Gloria http://www.youtube.com/watch?v=bq2aHdot40A&feature=youtube_gdata_player
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