¿Y a ti, como te habla Dios?

“Tu palabra es una lámpara que guía mis pies  y una luz para mi camino.”  (Salmo 119:105 NTV)

Una de las preguntas mas comunes que me han hecho es: “¿Y a ti, como te habla Dios?”; hay ocasiones que al preguntármelo, me dan la impresión de que creen que oigo una gran voz del cielo o algo así como en la película de Los Diez Mandamientos, cuando Dios le hablaba a Moises (Charlton Heston), je, je.

Pero no es así, a mi me habla exactamente como te habla a ti. Dios nos habla diariamente, y sin excepción.

Frecuentemente, me encuentro sentado en la compu escribiendo esto que recibes a diario, mi esposa esta a unos cuantos metros en la cocina preparando el desayuno o la comida, y me empieza a platicar algo, sigue hablándome y de repente me dice: ¿Qué opinas? Upsss… Levanto los ojos casi desorbitados y le digo: ¿me estabas hablando a mí?... ya no les cuento lo que sigue, porque… ya no me da tiempo, je. je. Pero esto me sirve de claro ejemplo de que nuestro Dios nos quiere hablar a diario, PERO nosotros no le ponemos atención.

¿Cual es el medio que usa Dios para hablarnos? ¡Su Palabra escrita! Como la Biblia es un libro vivo, cada ocasión que la abrimos y leemos algo en ella, esto que leemos es utilizado por Dios para hablarnos directa y específicamente. Dios no nos habla para darnos información como si fuera el periódico del cielo, el nos habla para moldear nuestro carácter. Y un milagro que casi no nos damos cuenta, es que lo que leemos en la Biblia se aplica exactamente a la situación por la que estamos pasando, y no solo a situaciones problemáticas, sino también a las situaciones de triunfo y éxito.

Cuando por las aflicciones nos refugiamos en la Palabra de Dios, es muy bueno, pero Dios nos quiere hablar a diario para irnos fortaleciendo y desarrollando más a la imagen de su Hijo Jesucristo. Es por esto que, cuando lo buscamos en Su palabra, y el nos dice: ¡PERDONALO!, nosotros le respondemos al Señor ¿Pero como?, ¿Por qué? ¿No te acuerdas Señor todo lo que me hizo?... y el Señor sonriendo nos muestra que todo el curso divino que el impartió a todos los que lo buscaron diariamente, para aprender a perdonar y ser enormemente bendecido con esto, lo impartió los últimos meses, a quien atendio diariamente a escucharlo. Ufffff, nos fuimos de pinta y ahora al momento del examen, no sabemos nada. Benditos exámenes extraordinarios conseguidos por nuestro Señor Jesucristo, que nos dan la bendición de una segunda, tercera, etc. oportunidad.

Ponte al corriente en lo que Dios quiere decirte, empieza hoy, puedes empezar con el evangelio según San Juan, lee solo 1 capitulo diario y pídele al Espíritu Santo que te muestre lo que Dios te esta hablando. O empieza con las cartas del Apóstol Pablo, Dios te hablara muchísimo a través de todo esto.