jueves, mayo 31, 2012

El Sentimiento De Culpa Y El Perfeccionismo Destruye Tu Confianza


"Queridos hermanos, si el corazón no nos condena, tenemos confianza delante de Dios." (1 Juan 3:21 NVI)

Tú probablemente has notado que tu confianza va y viene. Varía mucho de un día para otro - un día estás arriba, y al siguiente día estás abajo. ¿Qué es lo que causa esta situación? ¿A que se debe esto? 

En parte, se debe a lo que está pasando dentro de ti. La Biblia nos enseña: "Si nuestro corazón no nos condena, tenemos plena confianza ante Dios" (1 Juan 3:21).

Cuando encaramos las heridas de la vida, los hábitos y las obsesiones, es importante que evitemos la auto-condenación y vivamos plenamente en la confianza de que Dios nos ha perdonado.

¿Qué causa la auto-condenación?

La culpa no resuelta. El rey David escribió: "Mientras me negué a confesar mi pecado,  mi cuerpo se consumió, y gemía todo el día." (Salmo 32:3 NTV).

Esto me recuerda el letrero en un taller mecánico que decía: "Un motor limpio produce más potencia". Esto, también es verdadero para los seres humanos. Sir Arthur Conan Doyle, el hombre que escribió "Sherlock Holmes", una vez les jugo una broma a 12 de ingleses prominentes.  Les envió una nota anónima que decía: "Todo se ha descubierto. Huye lo mas rápido que puedas" Durante las 24 horas siguientes, ¡ocho de esos hombres habían abandonado el país! La culpa destruye tu confianza.

Las expectativas poco realistas. Esto también se conoce como perfeccionismo --- el sentimiento de que debes ser impecable, de que debes ser perfecto, de que tienes que complacer a todos, de que siempre tienes que hacer más, de que no estas autorizado a descansar.

Si tu eres un perfeccionista, tu frase favorita es: "Yo debería de... Yo debo de... Yo tengo que..." Tú siempre estás haciendo algo más.

Si tú eres una persona normal, y si tienes tres cosas que hacer en tu lista de pendientes del día; haces una de ellas, dejas otra de ellas a medias, y la tercera se te olvido que la tenías que hacer. Te vas a tu casa por la noche, te recuestas cómodamente y te sientes muy satisfecho de tu día.

Pero si tu eres una persona perfeccionista, y tienes 29 cosas en tu lista de pendientes "para hacerlas hoy"; terminaras 28 de ellas antes de irte a tu casa; ¡y te sentiras todo un fracasado! La Biblia dice: "He visto que aun la perfección tiene sus límites; ¡sólo tus mandamientos son infinitos!” (Salmo 119:96 NVI).

Tanto la culpa como el perfeccionismo causan una falta de confianza en nuestras vidas. Mañana veremos cómo podemos sustituir a la condenación por confianza.

Piensa en esto:

¿Qué es lo que tú necesitas confesar a Dios para luego dejarlo ir, hoy?
Si tú eres un perfeccionista, ¿de qué manera ha afectado esto tu confianza?

No hay comentarios:

Publicar un comentario