¿Te enojas controladamente?

Recuerdo cuando en la Ciudad de México asistía todos los Jueves a las 6 de la tarde a dar un estudio bíblico al Reclusorio Oriente de esa ciudad, aunque nunca dejo de impresionarme el entrar a ese lugar, me agradaba enseñarles del inmenso amor de Dios por ellos. Las cosas que mejor recuerdo son: Que el 99% de los internos juraban por su madre que eran inocentes y que con solo diez mil pesos que les prestara saldrían libres. Y lo segundo que recuerdo es lo que me impresiono machísimo, los que reconocían estar ahí por un crimen, la inmensa mayoría me decían: “No se lo que hice, solo recuerdo que me llene de ira y cuando me di cuenta, ya estaba el otro muerto a mis pies”

Por esta condición tan común en el ser humano, el rey Salomón escribió en su libro de Proverbios.

“El necio da rienda suelta a su ira,  pero el sabio sabe dominarla.”(Proverbios 29:11 NVI)

Una persona necia, es aquella que actúa en forma imprudente, ignorante, obstinadamente y con presunción. En esencia es una persona tonta y terca; y por esta razón, sus acciones solo le ocasionas daño a su persona y a los que se encuentren cerca.

La sabiduría es distinta que la inteligencia; pues la sabiduría es la que te hace tomar decisiones que beneficien no solo a quien toma la decisión, sino a todos los cercanos a el y a la comunidad.

Definitivamente los que enloquecieron de ira y cometieron algún ilícito, se pueden catalogar como necios, y la Biblia dice que la sabiduría proviene del estudio y aplicación de la Palabra de Dios.

Lo que darían aquellos internos del Reclusorio Norte por haber obtenido la sabiduría que proviene de las Escrituras, y haber controlado su ira, para no tener que pasar parte de su vida detrás de las rejas.

Y tú cuando te enojas, ¿actúas controladamente? La Palabra dice “airaos mas no pequéis”, La Palabra lo que nos indica con esto es que el enojo, coraje, molestia e incluso ira, son naturales en el ser humano, pero el pecado no esta en sentirla, sino en las acciones que se toman en base a ella. Es como el caso de la tentación, que el pecado existe hasta que uno cede a esta, y no mientras se esta siendo tentado.

Una característica de que estas perdiendo el control de tu ira es: ¿Has maltratado a alguien a quien amas?, ¿No tienes paciencia ni tolerancia con los que actúan diferente a tus expectativas?... Si este es el caso, busca sentarte a solas y medita en esto, inicia leyendo el libro de los Proverbios de Salomón, y medita en ellos al menos 10 minutos diarios, buscando ponerlos en práctica ese mismo día.