Recuerdo a un joven que se sentaba junto a mí a escuchar las
enseñanzas de la Biblia, a finales de los 80’s. Venia de haber llevado una vida
de vicio y depravación, y en esa época iniciaba una vida de paz y de provecho
en el estudio de la Escrituras. Asistía frecuentemente, trajo a toda su familia,
hasta a su abuelita, y todos empezaron a conocer más de Dios y su plan perfecto
para cada uno.
Tiempo después, me entere de que ya no asistía frecuentemente a estos
estudios y años después me toco verlo salir en la televisión junto con algunos
de sus familiares, no como un artista o un destacado conferencista, sino como la
cabeza de una terrible y sanguinaria banda de malhechores que había sido
aprendida. Ya se imaginaran mi enorme sorpresa al verlo ‘formado para la foto’ y
escuchar su nombre y todo de lo que se les
acusaba.
Actualmente esta purgando sentencia de 50 años en una prisión federal
del norte de México, y me entere de que le mando decir a su maestra de estudios
de la Biblia, lo arrepentido que estaba de no haber puesto por obra lo que
aprendió en su clase de la Biblia. Esto es un clásico ejemplo de las terribles
consecuencias de las malas decisiones, buscando amasar una fortuna en base de
terribles ilícitos, destruyo totalmente la paz y armonía de su hogar y de sus
familiares.
El Señor Jesús dijo en el Evangelio según San Juan
6:63:
“El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha. Las
palabras que yo les he hablado son espíritu y son vida”.
(RVC)
Dentro de nosotros, en nuestra mente se encuentran guerreando los
deseos de nuestra carne y los de nuestro espíritu; y solo nosotros decidiremos a
cuales obedecer y complacer.
Tu carne te pedirá que hagas lo que sea para solo obtener comodidades
y placer físico, el espíritu te pedirá que busques mas las cosas que no perecen,
las trascendentales, las cosas de la vida eterna.
“Y nosotros hemos recibido el Espíritu de Dios (no el espíritu del
mundo), de manera que podemos conocer las cosas maravillosas que Dios nos ha
regalado.
Les decimos estas cosas sin emplear palabras que provienen de la
sabiduría humana. En cambio, hablamos con palabras que el Espíritu nos da,
usamos las palabras del Espíritu para explicar las verdades espirituales;” (1
Corintios 2:12-13 NTV)
Las verdades de Dios solo se pueden entender mediante el Espíritu
Santo en ti, quien al recibir a Jesús como tu salvador, empieza a revelarte la
palabra de Dios.
“Pero el hombre natural no acepta las cosas del Espíritu de Dios,
porque para él son necedad; y no las puede entender, porque se disciernen
espiritualmente. En cambio, el que es espiritual juzga todas las cosas; pero él
no es juzgado por nadie”. (1 Corintios 2:14-15
LBLA)
El poder comprender la Biblia, solamente se logra a través del
Espíritu Santo. Es como la persona que van al cine a ver una película en 3D, y
al salir del cine se quejan de que la película se veía realmente mal, sin buena
definición, y diciendo que no vieron ninguna escena en tercera dimensión; lo
primero que se le deberá de preguntar es si usaron los visores especiales o
lentes para apreciar la 3D, y de seguro responderá ¡que no! Para poder apreciar
el efecto de 3D en una película, debes de usar los lentes especiales para este
propósito.
Para que el leer la Biblia cambie tu vida, deberás de leerla de la
mano del Espíritu Santo, porque si no es así, solo será un libro más, sin que
cambie tu vida.
“En cuanto a ustedes, la unción que de él recibieron permanece en
ustedes, y no necesitan que nadie les enseñe. Esa unción es auténtica —no es
falsa— y les enseña todas las cosas. Permanezcan en él, tal y como él les
enseñó”. (1 Juan 2:27 NVI)
Al tener a Cristo como el Señor de tu vida, lo primero que notaras es
que tu forma de entender las escrituras cambiara dramáticamente; y eso es la
intervención del Espíritu Santo en ti.
“Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la
verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y
les anunciará las cosas por venir”. (Juan 16:13
NVI)
El Espíritu Santo te guiara a todo lo que es verdadero, bondadoso y
de bendición para ti; ya no mas preocupaciones por decisiones absurdas y con
consecuencias catastróficas, ahora la Palabra de Dios será la misma voz de Dios
hablándote a tus ojos, ya no mas un libro incomprensible con historias
fantásticas de seres increíbles; ahora la Biblia será tu verdadera guía para
tener una vida de éxito y cumpliendo el propósito de Dios para ella.
“También ustedes, luego de haber oído la palabra de verdad, que es el
evangelio que los lleva a la salvación, y luego de haber creído en él, fueron
sellados con el Espíritu Santo de la promesa”, (Efesios 1:13
RVC)
A partir de este momento ¡ya no estas sola!, el Espíritu Santo esta
enseñándote, mostrándote y guiándote para que tengas la mejor vida imaginable. Y
ahora que ya tienes un ‘maestro’ excepcional quien te enseñara todo lo que esta
escrito en la Biblia para tu provecho, comienza a leerla; y así, NO TOMES MALAS
DESICIONES.
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