miércoles, febrero 22, 2012

¿Eres completamente libre?

LA LIBERTAD es algo que se ha buscado desde el inicio de la humanidad, millones han muerto tratando de obtenerla, y desde los primeros habitantes de la tierra hasta el bebé que se encuentra en su cuna, TODOS buscan afanosamente su libertad. 

Es muy frecuente que las personas que no conocen la Palabra de Dios, cuando se les comenta que la verdadera libertad solo se encuentra en Cristo (“y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres” [Jesús de Nazaret] Juan 8:32), ellos responden que los mandamientos divinos solo cuartan y restringen su libertad, sin darse cuenta que la ley de Dios solo tiene el propósito de que vivamos tranquilos y en paz.

¿Alguna vez has dicho una mentira que tengas que sostener por largo tiempo, cuidando repetirla sin modificarla y recordando a quien se la dijiste?, de seguro deben de ser un infierno las reuniones donde se encuentren las personas a quienes les dijiste esa mentira y también estén presentes las personas que conocen la verdad… cuidando de que no se toque el tema entre ellos y por supuesto que no te pregunten algo al respecto… ufff, eso No es estar en paz.

Y que decir de quien ha robado algo o a matado a alguien; duerme literalmente con un ojo abierto, solo esperando escuchar a la policía tocar a su puerta. Y que opinas de los adúlteros, siempre preocupados de no hablar dormidos y de no mencionar el nombre equivocado a la esposa… ¿te fijas como al no guardar los preceptos de Dios NO podemos vivir en paz?

El otro día veía en las noticias, que habían encontrado una de las guaridas de los capos mas buscados en México y Estados Unidos; las fotos mostraban como vivían, y a pesar de que su fortuna, que se estima literalmente en miles de millones de dólares, esa guarida en medio de la sierra, contaba con lo mas adelantado de comunicación y esparcimiento, pero alejado y escondido de toda la civilización. De verdad no creo que valga la pena tener tanto dinero y vivir de esa manera; literalmente esa no es vida. El Salmista escribe lo siguiente:

“Sólo así seré completamente libre, pues he buscado seguir tus mandamientos”. (Sal 119:45 RVC)

No nos damos cuenta de la enorme ventaja de los mandamientos de Dios hasta que al no cumplirlos nos metemos en terribles problemas. La Palabra de Dios nos guarda de peligros. Durante la peste bubónica que azotó al mundo conocido en el siglo XIV, aniquilando a 1/3 de la población mundial, el no tomar en cuenta la ley de Dios fue lo que hizo que se convirtiera en una devastadora pandemia. Al iniciarse el contagio, NO aislaron en cuarentena a los enfermos, contagiando a todos con los que tenían contacto con los enfermos. La ley de Dios dice que al enfermo, se le aísle lejos de la población, y el que lo toque, deberá de lavarle muy bien antes de regresar a la población; que son los principios básicos de la cuarentena y asepsia.

En casos como este, la Palabra si es restrictiva; ¡pero para tu bien!, para tu supervivencia. La ley o Palabra de Dios solo busca nuestro bien; por esta razón, al buscar y guardar los mandamientos de Dios, podremos andar en completa libertad, sabiendo que no nos pasara nada malo.

¿Y que hay acerca de la diversión? Bueno, si a diversión le llamas a jugar a la ‘ruleta rusa’, no veo realmente como te puedes divertir con ello.

Recuerdo muy bien al hijo de un conocido mío, que siguiendo la parranda con sus amigos, terminaron en una fiesta fuera de control, haciendo todo lo que sus instintos les pedían. Meses después, en una cama de hospital cuando lo fui a visitar para platicarle acerca del amor de Jesús, llorando me decía: “¿por que a mi, solo fue una única ves,.. Por que yo?..”. en esa fiesta sin control, se había contagiado de SIDA, y su cuerpo se estaba literalmente colapsando, semanas después falleció.   

La Palabra de Dios nos guarda, si nosotros la guardamos en nuestro corazón y actuamos acorde a ella; la verdadera diversión en la vida, es vivirla llena del amor de Cristo en paz y en alegría. Caminar en la verdad, es caminar de la mano de Jesucristo, (Jesús le dijo: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Juan 14:6).

En el momento que comiences a ver la Palabra de Dios (la ley) como los señalamientos que te llevan a una vida de prosperidad, paz y alegría, en ese momento iniciaras tu vida en completa libertad.

“Confía en el Señor, y practica el bien; así heredarás la tierra y la verdad te guiará”. (Salmo 37:3 RVC)


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