jueves, agosto 02, 2012

Busca Estar Dentro De Los Tiempos De DIOS



“Subid vosotros a la fiesta; yo no subo a esta fiesta porque aún mi tiempo no se ha cumplido.” (Juan 7:8 LBLA)

Nuestros días y semanas pasan volando mientras estamos metidos en la red, en Internet; mientras atendemos nuestras comunicaciones formales, laborales y sociales a través de nuestro celular ‘inteligente’, el cual no se separa de nosotros mientras estemos despiertos, estando atentos a cualquier mensaje, correo electrónico o imagen que nos sea enviada.

Incluso en lo relacionado con nuestra vida espiritual, nos echamos encima un exceso de compromisos; congresos y reuniones, estudios bíblicos y grupos en casa, así como comidas y tomadas de café, como resultado de nuestros esfuerzos por llegar a ser como Jesús. Estamos desarrollando una característica nunca vista en la vida de Jesús: ¡ocupacionitis!

Nunca podrás imaginarte a Jesús como una persona apresurada y a las carreras, corriendo de compromiso a compromiso. Jesús nunca se mostró preocupado por hacer mas cosas de las que podía lograr en su día.  

¿Puedes imaginarte lo que a los expertos en eficiencia le hubieran dicho?

"Jesús, podrías hacer mucho más si tuvieras más asistentes que sólo estos 12."

"Señor, realmente necesitas asistir a esa reunión del consejo en Capernaum, ¡si quiere ganarte a los fariseos!"

"¿Por qué sigues aquí en Galilea? Tu ministerio sería mucho más grande si te mudaras a vivir a Jerusalén. ¡Cuanto talento desperdiciado!

“y sus hermanos le dijeron: — ¡Sal de aquí y vete a Judea, donde tus seguidores puedan ver tus milagros!  ¡No puedes hacerte famoso si te escondes así! Si tienes poder para hacer cosas tan maravillosas, ¡muéstrate al mundo! (Juan 7:3-4 NTV)

Jesús simplemente les respondió que el momento no era el adecuado, porque el estaba acorde los tiempos del Padre.

Ahora bien, lo que sucedió, fue que posteriormente, Jesús los siguió pisándoles los talones a sus hermanos. Pero lo hizo con un bajo perfil, porque no quería ser absorbido por acontecimientos que pudieran distraerlo de su propósito o que pudieran sacarlo del programa y horario de Dios (Juan 7:10).

Una y otra vez, podemos ver a Jesús a través de los evangelios, hablando de la voluntad del Padre. Jesús sabía que había sido enviado por Dios con un propósito, y se aferró a este plan y propósito.

¿Cuál es la mejor manera de administrar tu tiempo? Averigua cual fue el propósito de Dios cuando te creó, lo hizo ¿para que hicieras que cosa?, y luego decididamente busca cumplir y llevar a cabo el propósito de Dios para tu vida (Lucas 9:51).

Piensa en esto:

Piense en tu día común y corriente,  y apunta todas tus actividades. ¿Cuál de estas actividades son en la búsqueda del propósito de Dios para tu vida?

¿Qué medidas puedes tomar para reducir tu “ocupacionitis”?

No hay comentarios:

Publicar un comentario