|
“Subid vosotros a la fiesta; yo no subo a esta fiesta porque aún mi
tiempo no se ha cumplido.” (Juan 7:8 LBLA) Nuestros días y semanas pasan volando mientras estamos metidos en la red, en Internet; mientras atendemos nuestras comunicaciones formales, laborales y sociales a través de nuestro celular ‘inteligente’, el cual no se separa de nosotros mientras estemos despiertos, estando atentos a cualquier mensaje, correo electrónico o imagen que nos sea enviada. Incluso en lo relacionado con nuestra vida espiritual, nos echamos encima un exceso de compromisos; congresos y reuniones, estudios bíblicos y grupos en casa, así como comidas y tomadas de café, como resultado de nuestros esfuerzos por llegar a ser como Jesús. Estamos desarrollando una característica nunca vista en la vida de Jesús: ¡ocupacionitis! Nunca podrás imaginarte a Jesús como una persona apresurada y a las carreras, corriendo de compromiso a compromiso. Jesús nunca se mostró preocupado por hacer mas cosas de las que podía lograr en su día. ¿Puedes imaginarte lo que a los expertos en eficiencia le hubieran dicho? "Jesús, podrías hacer mucho más si tuvieras más asistentes que sólo estos 12." "Señor, realmente necesitas asistir a esa reunión del consejo en Capernaum, ¡si quiere ganarte a los fariseos!" "¿Por qué sigues aquí en Galilea? Tu ministerio sería mucho más grande si te mudaras a vivir a Jerusalén. ¡Cuanto talento desperdiciado! "
“y sus hermanos le dijeron: — ¡Sal de aquí y vete a Judea, donde tus
seguidores puedan ver tus milagros! ¡No puedes hacerte
famoso si te escondes así! Si tienes poder para hacer cosas tan maravillosas,
¡muéstrate al mundo! (Juan 7:3-4 NTV)
Ahora bien, lo que sucedió, fue que posteriormente, Jesús los siguió pisándoles los talones a sus hermanos. Pero lo hizo con un bajo perfil, porque no quería ser absorbido por acontecimientos que pudieran distraerlo de su propósito o que pudieran sacarlo del programa y horario de Dios (Juan 7:10). Una y otra vez, podemos ver a Jesús a través de los evangelios, hablando de la voluntad del Padre. Jesús sabía que había sido enviado por Dios con un propósito, y se aferró a este plan y propósito. ¿Cuál es la mejor manera de administrar tu tiempo? Averigua cual fue el propósito de Dios cuando te creó, lo hizo ¿para que hicieras que cosa?, y luego decididamente busca cumplir y llevar a cabo el propósito de Dios para tu vida (Lucas 9:51). Piensa en esto: Piense en tu día común y corriente, y apunta todas tus actividades. ¿Cuál de estas actividades son en la búsqueda del propósito de Dios para tu vida? ¿Qué medidas puedes tomar para reducir tu “ocupacionitis”? |
jueves, agosto 02, 2012
Busca Estar Dentro De Los Tiempos De DIOS
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario